El presidente del Partido Justicialista Néstor Kirchner afirmó hoy que "es hora de que el Congreso se ponga a discutir definitivamente la ley penal del menor para dar la solución que corresponde", al hablar en un encuentro partidario realizado en San Miguel. Kirchner aludió al caso del asesinato de Daniel Capristo por un agresor de 14 años y criticó a los que responsabilizan del tema al gobernador de Buenos Aires Daniel Scioli. "¿Qué puede hacer un gobernador con un menor que hace un año tuvo un problema con una pistola en el colegio y no lo internaron, y luego si ese menor roba una moto con una pistola en enero de este año y tampoco las justicia lo interna?", se preguntó el ex presidente. Agregó que ese adolescente "hoy mata a un hermano de cuatro o cinco tiros" y sostuvo que "es hora de que la justicia tome las determinaciones que corresponden: no puede dejar en libertad por más inimputable que sea a alguien que tenga ese marco de peligrosidad". Citó a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sobre la necesidad de abordar el tema de seguridad "sin especulaciones" y en referencia a Francisco de Narváez, a quien no mencionó, Kirchner dijo que "hay que actuar sin tratar de hacer como ese señor que tiene tanta plata y que habla en cada partido de fútbol de la seguridad". "Con estos temas no cabe la especulación electoral y tampoco tratar de que una radio o un diario venda más, hay una responsabilidad del Estado pero también de los que informan", agregó. También consideró que "para recuperar la seguridad no sólo se necesitan más patrulleros y Gendarmería en las calles, hay que profundizar también el modelo para que los pibes tengan trabajo, educación, sueños y un futuro mejor con un destino que los contenga fuertemente". Acompañado por el gobernador Scioli y el intendente de San Miguel Joaquín de la Torre, Kirchner fustigó también a los dirigentes del PRO y de lo que define como la "Alianza residual", recordando que acompañaron los golpes de Estado y las políticas neoliberales que "dejaron a millones de argentinos en la calle". "Son las mismas caras de esta alianza residual que se arrastra entre las mesas rurales patronales", expresó y dijo que "hay que tener memoria y acordarse de estos señores, que hoy hablan y ayer fundieron a la patria". "Vemos a los representantes del neoliberalismo que se cayó en el mundo, la derecha neoliberal, que hablan de construir la Argentina cuando la vendieron y dejaron a la gente en calle" dijo y distinguió a esos dirigentes de los militantes peronistas que "no tienen nada que ver con el PRO, que en los años 76 y 90 profundizó el quiebre del país". "Este peronismo puede ser disidente, es debatidor, pero no hay que confundir disentir y debatir con la traición", advirtió y opinó que "millones de voces pueden más que un traidor que abandona la trinchera". Al referirse al problema del dengue aseguró que siente "vergüenza" al "ver dirigentes desesperados tratando lucrar con la enfermedad" y dijo que "no es una enfermedad de la pobreza: puede haber dengue en el lugar más rico y en el más pobre si no hay condiciones de higiene necesaria". Destacó que el dengue en Brasil es "200, 300, 500 o mil veces más importante que en Argentina" y criticó a los que lo usan como "instrumento electoral en vez de trabajar con los argentinos" para erradicarlo. Asimismo Kirchner expresó que el país necesita "medios democráticos", en lugar de "diarios que acompañaron a la dictadura y que taparon sus crímenes porque estaban jugados con el golpe". "Hoy hablan de democracia pero siguen soñando con los golpes que acompañaron tanto" señaló y recordó que el año pasado la presidenta sufrió un ataque destituyente de estos sectores que "siempre estuvieron aliados a la oligarquía".
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